¿Qué me deparará este día? Así comienza
tu mente y tu corazón cada mañana. Cada
día tiene su propia lucha dijo Jesús. Pero a veces parece como si ya
estuviese escrito lo que va a pasar, como si no pudiera suceder nada nuevo,
especial; como si en realidad no valiese la pena esperar nada. Y sin embargo tu
corazón y tu inconsciente cada mañana siguen esperando. No mortifiques esa ilusión. Es más, piensa, proyecta, cómo te gustaría que fuese tu trabajo
de este día, tu mañana, los encuentros con las personas, tus actitudes. Piensa
cómo le gustaría al Señor que fuese, cómo quiere Jesús hoy actuar a través
tuyo. Pregúntale. Y ahora pide. Suplica sin miedo porque El nos ha prometido Yo os daré una
fuerza a la que no podrán hacer frente ningún adversario vuestro y también En el mundo tendréis luchas pero
no tengáis miedo Yo he vencido al mundo. Sí, El te asegura que la esperanza,
la ilusión, el proyecto, la visión de futuro, no es una quimera sino la clave
de la vida; como el pintor sueña, “ve” el cuadro y se lo encuentra una y
otra vez en la mente, a pesar suyo, como si le persiguiese, hasta que lo empieza a pintar, poco a poco, al principio
quizás con trazos inseguros, cada vez con más fuerza, borrando y volviendo a
pintar, tomando distancia, parando y volviendo a la tarea, siempre imperfecto,
siempre mejorable, es tan bello lo que
había visto en la mente, … el proyecto precioso de Dios que El ha puesto
en tu corazón para que luches por él. No lo dudes –te lo asegura una doctora de
la Iglesia, santa Teresita- Dios no puede
inspirar deseos irrealizables… Una y otra vez vuelve a la ilusión primera, al amor primero, que El te suscitó. No
dudes de que ya ha empezado a suceder. Ten esperanza, una esperanza muy activa,
lucha, levántate, empieza de nuevo, proyéctate y ponte en camino. Esto no acaba
más que empezar, … lo mejor está por venir. Como dice Francisco: Espera el mañana de Dios, del Dios de las
sorpresas. No huyamos de Jesús resucitado, nunca nos declaremos
muertos, pase lo que pase ¡Nada puede más que su vida que nos lanza hacia
adelante!
El cristiano ha de aprender del Niño Dios el arte de recibir regalos y sorpresas
ResponderEliminarMuchas gracias por poner luz y esperanza, especialmente en estos tiempos tan difíciles, en los que continuamente estamos tentados de tirar la toalla... Pero si, como dices, somos conscientes de que Jesús camina con nosotros, nunca nos faltarán las fuerzas para seguir luchando.
ResponderEliminarGacias Carlos (Chachi) por todos estos escritos, verdaderamente son un regalo. A mi especialmente me ha llenado mucho éste último. Un abrazo enorme, Jose ¨El largo¨.
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